La pérdida de un ser querido o la ruptura de la relación son situaciones emocionalmente difíciles que para poder superar esos sentimientos de tristeza y dolor, es necesario pasar por un proceso donde poco a poco puedas mejorar tu ánimo y recuperar la alegría con la que te gustaría vivir.

Los espacios en general están cargados de energías que pueden llegar a influir en nuestros estados de ánimo, por lo tanto, si un lugar o un espacio de tu casa, por ejemplo, tu habitación no te hace sentir bien lo mejor es que empieces a preguntarte ¿Qué es lo que te genera estas emociones

Para ello hoy te decimos 4 cosas para poder sanar un espacio después de una pérdida. Te darás cuenta de que a medida que vayas implementando algunas de estas cosas, tu espacio se sentirá con una energía diferente y podrás sentirte mucho mejor. Pero antes, es importante reconocer que cada persona tiene un proceso diferente de asimilar estas situaciones.

1. Retira los objetos que te hacen acordar de esa persona

Cuando afrontamos la realidad de que esa persona ya no está en tu vida, empezamos a notar que los objetos que alguna vez te regalo o una sola fotografía puede revivir el dolor de esa pérdida. Por lo tanto, en un principio puedes retirar los objetos que te hagan recordar a esa persona, no pretendas deshacerte de ellos, guárdalos en una caja y almacénalos en un armario o un sitio donde no estén accesibles.

Cuando haya pasado cierto tiempo puedes pensar en volver a colocar ciertas cosas en tu espacio, siempre y cuando no sientas que afecte tus sentimientos. De lo contrario piensa en tomar la decisión de deshacerte de ellos definitivamente al regalarlos o donarlos a alguien que si pueda necesitarlos.

2. Haz una limpieza general

Hacer el aseo de un espacio no solo será una actividad que puede ayudarte a ocupar tu mente y no hacerte pensar en la pérdida; es asumir que estás en un proceso de cambio y que por eso te mereces estar en un ambiente limpio, ordenado y sano.

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3. Cambia ligeramente la decoración

Para sanar un espacio es necesario darle algo nuevo que haga notorio el cambio por el que estás pasando. Por eso si retiraste una fotografía puedes reemplazarla por un cuadro con una frase que te motive, o una foto que te genere sentimientos positivos.

Si ya llevas un tiempo aceptando la partida de una persona y te nace hacerle un pequeño homenaje en tu hogar, puede ser a través de las flores. Un ramo con colores llamativos que simbolicen que no la has olvidado pero que aún sigues queriéndola.

4. “Rituales” para sanar un espacio

Este consejo no tendrá sentido para algunas personas, pero para otras por sus creencias puede que les sea de mucha utilidad. No se trata de hacer brujería o un hechizo mágico que te haga asimilar la pérdida de la persona y hacerte sentir feliz de inmediato; se trata de realizar pequeños “rituales” con objetos que se creen que pueden absorber esas malas energías en el espacio y de esa manera hacerlo sanar poco a poco para que tengas más tranquilidad.

Quemar salvia blanca, ubicar minerales como piedras o cristales energéticos en diferentes puntos de la habitación, tener plantas en el interior de tu casa o regar un poco de sal marina, son algunos de los rituales que podrás encontrar para purificar o quitar las malas energías de un espacio.